martes, 29 de septiembre de 2009

XXXmo. ANIVERSARIO DE LA PARROQUIA DE NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN Y DE LOS PADRES ROGACIONISTAS

La parroquia de Nuestra Señora del Carmen, confiada a los Padres Rogacionistas, festeja:
"30 años de Presencia de los Padres Rogacionistas en Campana"
"30 años de la Creación de la Parroquia"
"Bodas de Oro Sacerdotales del P. Ernesto Butano"

Los Eventos realizados han sido:

22-09 -La noche de los recuerdos -
19,00: Santa Misa en la Parroquia
20,00: Recuerdos e imágenes de los 30 años: Salón Parroquial

23-09 -Aniversario de creación de la Parroquia del Carmen - Encuentro de las Comunidades -
19,00: Santa Misa

24-09 Capilla San Pedro:
18,00: Misa de oración por los enfermos, celebrada por P. Rufino Giménez Fines

25-09 Capilla San Felipe: Fiesta de Ntra. Sra. Del Rosario de San Nicolás
16,30: Santa Misa

26-09 -Fogón de los jóvenes - 20,00 hs.: En el Colegio "Padre Aníba di Francia"
Capilla San Pedro: 14,30 hs.-18,00 hs.: Jornada de Capacitación para agentes sociales, dictada por la Lic. Susana García de Lamberti

27-09 -Celebración 30 años de la Parroquia y Bodas de Oro Sacerdotales de P. Ernesto Butano -
Santas Misas: 8,00 hs.-19,00 hs.
11,00 : Bendición del tríptico de San Aníbal di Francia
11,30: Santa Misa solemne presidida por Mons. Oscar Domingo Sarlinga, nuestro Obispo diocesano, y concelebrada por el Padre Angelo P. Rufino (todos Rogacionistas), Mons. Galuppo, vicario general, P. Nestor Villa y P. Hugo Lovatto, cura párroco de la iglesia catedral de Santa Florentina.

A continuación se compartió un almuerzo con la comunidad.

A las 20 se ofreció un concierto.

En su homilía, Mons. Oscar Sarlinga destacó “(…) la «preexistencia» de San Anibal María Di Francia, al referirse a su continua dedicación a los demás, como fuente de Amor y paz, que provenían de su devoción a la Eucaristía”.

En efecto, el Padre Aníbal, compenetrado por la compasión de Jesús por "las multitudes cansadas y abatidas, como ovjeas sin pastor" (Mt 9,36), procuró difundir "Rogate" («rogad»), esto es, el mandato de Jesús de rogar al dueño de la mies por el don de los "buenos obrero para la miess", sabiendo que difundía, de tal modo, un instrumento eficaz de evangelización y servicio de caridad, al punto que instituyó para los fieles la «Unión de oración por las vocaciones».

En cuanto a su vida, Aníbal María Di Francia nació en Messina (Italia) el 5 de julio de 1851 de una famila de la nobleza ciudadana. Jovencísimo, durante la adoración de la Eucaristía, fuente iluminadora de su vida, intuyó por inspiración divina la prioridad de la oración en la pastoral de las vocaciones. Los versículos del Evangelio "¡La mies es mucha, pero los obreros son pocos! Rogad pues al dueño de la mies, para que envíe obreros a su mies" Mt 9, 37-38; LC 10,2, fueron la luz de su vida y el manantial de su apostolado.

Desde joven percibió, muy clara, la vocación al sacerdocio. Animado del celo por la salvación y la protección de todas las personas, especialmente de los pobres y de los huérfanos, se dedicó a la promoción humana y espiritual de una de las zonas más pobres y degradadas de su cidudad, el barrio de Avignone.

Fue precisamente en aquel barrio, transformado radicalmente por su actividad apostólica, que inició los Orfanatos Antonianos (en 1882 el femenino, en 1883 el masculino) para acoger, socorrer y formar "civilmente y religiosamente" a la juventud más necesitada.

Atraídos por su carisma se unieron a él los hombres y mujeres que se comprometieron en el mismo apostolado. Así en 1887 fundó la Congregación de las Hijas del Divino Celo y en 1897 la Congregación de los Rogacionistas del Corazón de Jesús, con la tarea de vivir y difundir la enseñanza de Jesús sobre la necesidad de la oración por las vocaciones, y el servicio a los pequeños y a los pobres, también en tierra de misión.

El Obispo Oscar Sarlinga dijo además en su homilía que Aníbal María, hombre ejemplar, “(…) era un sacerdote culto y lleno de dedicación por las cosas de Dios y por la Iglesia, y que en su cultura tuvo especial cuidado en la predicación, y en la propagación de la devoción por la Eucristía, el culto a la Santísima Virgen María, los Santos, como amigos de Dios y como intercesores, y la manifestación de la particular devoción y espíritu de obediencia hacia el Papa como Obispo de Roma, Sucesor de Pedro y Vicario de Cristo, así como de los Obispos, como Sucesores de los Apóstoles y legítimos Pastores del Pueblo de Dios, todo lo cual alentó profundamente en él el anhelo misionero, el cual se concretó con la fundación de la Congregación de los Rogacionistas, los cuales cumplen en nuestra ciudad de Campana su XXXmo. Aniversario de presencia misionera”.

El Padre Aníbal terminó su vida terrena, vivida en constante y creciente ejercicio heroico de las virtudes cristianas, el 1 de junio de 1927 en Messina (Fiumara Guardia). Su Santidad el Papa Juan Pablo II lo proclamó beato el 7 de octubre de 1990 y lo canonizó el 16 de mayo de 2004.

lunes, 28 de septiembre de 2009

MISA de PUESTA EN POSESIÓN DEL PADRE ATILIO ROSATTE COMO CURA PÁRROCO DE SANTIAGO APÓSTOL DE BARADERO

El día sábado 26 de septiembre, en la celebración eucarística de las 19, el Sr. Obispo Mons. Oscar D. Sarlinga puso en posesión de su ministerio de cura párroco de la parroquia de Santiago el Apóstol (de la ciudad de Baradero) al Pbro. Atilio Rosatte, hasta ahora cura párroco de la Natividad del Señor, de Belén de Escobar.

IGLESIA DE SANTIAGO EL APÓSTOL de BARADERO

Concelebraron la Eucaristía Mons. Edgardo Galuppo, vicario general, Mons. Santiago Herrera, pro-vicario general y Rector del Seminario, el Pbro. Gastón Dedyn (perteneciente a la diócesis de San Rafael), quien fuera hasta el día 21 de septiembre cura párroco, Mons. Roberto Amondaráin (administrador parroquial de Ntra. Sra. de Luján, de Baradero), Mons. Ariel Pérez, y los Pbros. Hugo Lovatto (cura párroco de la iglesia catedral de Santa Florentina), Pablo Iriarte, Mauricio Aracena, Nicolás Guidi y Jorge Munier. La celebración estuvo asistida por el Rev. Diácono Fernando Fusari, residente en el Seminario Diocesano.

El Obispo agradeció sentidamente al Padre Gastón Dedyn, de la diócesis de San Rafael, su ministerio en la diócesis de Zárate-Campana desde noviembre de 2005 hasta el 21 de septiembre del corriente, en razón del traslado pastoral temporario desde la diócesis de San Rafael (cf canon 271). Destacó el Obispo el testimonio sacerdotal del citado sacerdote y su dedicación, augurándole todo lo mejor en su vida sacerdotal y apostolado en su diócesis originaria y de incardinación. Ya había estado el Sr. Obispo, junto con varios sacerdotes del Consejo presbiteral, para las fiestas pastorales trasladadas de la parroquia de Santiago Apóstol, el 23 de agosto ppdo., oportunidad en que se anunció la despedida del Padre Gastón y se expresó cuánto esta diócesis reconoce todo su fructuoso ministerio sacerdotal.

A partir del 26 de septiembre Mons. Roberto Amondaráin (hasta ahora capellán externo) asume como administrador parroquial la parroquia de Nuestra Señora de Luján, donde residirá, y el Diác. Fernando Fusari es adscripto a la parroquia de Santiago Apóstol, donde realizará su pastoral de fin de semana, hasta su ordenación sacerdotal, que tendrá lugar en el mes de diciembre.

Para colaborar más profundamente en ambas parroquias de la ciudad de Baradero (Ntra. Sra. de Luján y Santiago Apóstol) se prepara en fase final de su formación dos candidatos al diaconado permanente, cuya ordenación será anunciada en su oportunidad.

Participaron de la toma de posesión del cura párroco gran cantidad de fieles laicos, numerosas religiosas, sobre todo de las comunidades de Santiago de Baradero y Nuestra Señora de Luján, pero también provenientes de la Natividad del Señor de Escobar, de San Juan de la Cruz (de la misma ciudad) y de la ciudad de Zárate.

El Obispo destacó la presencia en la celebración de la mamá del Padre Rosatte y de la importancia del acompañamiento de la familia, pues la misma Iglesia «es familia de Dios», según dijo.

Al término de la misa, el Padre Rosatte tuvo unas sentidas palabras, de agradecimiento y de compromiso con la pastoreo parroquial, basadas sobre la pregunta de Jesús a Pedro: “¿me amas?” y sobre su pedido: “apacienta a mis corderos”, así como al lema que marcó su vida sacerdotal: “En tu nombre echaré las redes”, transmitiendo un mensaje de confianza, entusiasmo y alegría.

Luego de saludar a las autoridades civiles y a los representantes de instituciones del partido de Baradero que se encontraban presentes, el Sr. Obispo tuvo la siguiente homilía:

Queridos hermanos sacerdotes, diáconos, seminaristas, religiosos, religiosas, hermanos, hermanas


I
RECOMENZAR DESDE EL ESPÍRITU,
«QUE NOS RECUERDA TODO LO QUE JESÚS DIJO E HIZO»

Recomenzar desde el Espíritu, recomenzar desde Cristo… Es un entero programa de vida para nosotros, los cristianos. A fines de tomar todavía mayor conciencia de la importancia del Espíritu Santo en la vida de la Iglesia, nos puede ayudar el reflexionar acerca del Evangelio de hoy partiendo de las palabras del mismo Jesús en el Evangelio de San Juan, en vísperas de su Ascensión: “Les conviene que yo me vaya, porque así vendrá a ustedes el Espíritu que viene de mi Padre” (Jn 16, 7).

En efecto, la «partida» de Jesucristo es comienzo de una gran Presencia: con la Ascensión de Jesús a los cielos, la Iglesia fue compensada con creces en la venida del Espíritu Santo, el Espíritu de Consuelo, Aquél que nos defiende, sin cuya acción no habríamos podido conocer en profundidad a Jesucristo y su Palabra no podría resonar con fuerza hoy día en nuestros oídos interiores: “Pero el abogado, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, hará que ustedes recuerden cuanto yo les he enseñado y se lo explicará todo” (Jn 14, 26). Por el Espíritu, el Evangelio no sólo resuena en nuestro interior, sino que nuestro sentido espiritual lo recibe en plenitud.

Hoy, en esta Misa, aquí, en Santiago del Baradero, pedimos también al Espíritu que recuerde en nuestro interior la Sabiduría de Cristo para comprender y asimilar la Escritura, que acabamos de proclamar.

En primer lugar, a partir del proclamado Salmo 18 (8.10.12-14), que reza: “Preserva a tu siervo de la arrogancia, para que no me domine: así quedaré libre e inocente del gran pecado”, pedimos hoy la fortaleza para no dejarnos ganar por ese «pecado-puerta», que es la arrogancia, proveniente ella de la soberbia. Fíjense que, si bien es cierto que al Amor se le contrapone el odio, este último tiene una «puerta ancha» por donde entrar, que es la soberbia, y la manifestación de esta última, la arrogancia, que puede colarse en nuestras vidas de distintas maneras. Recomenzar desde Cristo y desde el Espíritu nos dará la «santa inocencia» frente a este pecado, que es «puerta» por donde entran todos los demás. Recomenzando desde el Espíritu de Amor, seremos «siervos» del Señor, de verdad, y no «dominadores» sobre su heredad.


II
EL «ESCÁNDALO» VERSUS LA CORRESPONSABILIDAD Y LA RECOMPENSA

A su vez, el Evangelio de este Domingo (Mc 9,38-43.45.47-48) nos dice que incluso el menor gesto realizado a favor de alguien por el hecho de ser discípulo de Jesucristo, quedará grabado en el Corazón divino: “Todo aquel que les dé a beber un vaso de agua, por ser ustedes de Cristo, les aseguro que no se quedará sin recompensa”, nos dice el Señor.

A continuación, en una especie de hipérbole como modo de expresión, tiene la intención de hacer tomar conciencia a sus oyentes de la gravedad que tiene el «escándalo» a los ojos de Dios, al punto que afirma Jesús: “El que escandalice a uno de estos pequeños que creen, más le valdría que le encajasen en el cuello una piedra de molino y lo echasen al mar”.

Es bueno que veamos el origen de esta palabra. La voz «escándalo» proviene de la palabra griega «skándalon», que denominaba, en primer lugar, el mecanismo o gatillo movible de una trampa, e incluso la trampa misma, como esas trampas en las que caen los animales en su andar o caminar. A partir de ese sentido originario, por extensión comenzó a aplicarse, en la misma lengua griega, a cualquier obstáculo situado en el camino y que es causa de tropiezo y caída para el caminante, como una «piedra de tropiezo y de caída subsiguiente». Es indudable que el Señor aplica el término «escándalo» en su sentido moral, pues quien escandaliza al prójimo con su acción o malos consejos u opiniones que inducen a la confusión, error o pecado a otra persona, la aparta, o colabora a apartarla, del camino del bien que conduce a la Vida, la Vida del Espíritu.

¿Cuántas veces hemos escuchado: «creo en Cristo pero no en la Iglesia»?. Sin querer juzgar de ningún modo las conciencias, lo cierto es que si algunos «pequeños» (en el sentido de aquellos que tienen una fe sólo incipiente, o débil, o no afirmada) se apartan de la Iglesia, Cuerpo de Cristo y Pueblo de Dios, Familia de Dios, por desconfiar de ella debido a la conducta de alguno o algunos de sus miembros, de un modo u otro acaban apartándose de Dios mismo y de su Enviado, su Hijo Jesucristo, como bien lo muestra el Apóstol San Pablo en la carta a los Romanos (cf Rom 2,18-24).
De aquí viene la «responsabilidad» que los cristianos tenemos los unos por los otros , y en especial hacia los «pequeños». ¡Qué ilícito, qué injusto, sería el querer aplicarnos las palabras de Caín: “(…) ¿acaso soy yo guardián de mi hermano?» (Gén 4, 9)”, lo cual equivaldría a decir, ¿quién me hizo custodio, quién me hizo responsable, de mi hermano, quién me hizo «corresponsable» de la fe de los otros, en la Iglesia?. Pero como la Iglesia es «familia de Dios», «construcción de Dios», somos responsables los unos de los otros de la edificación de nuestros hermanos humanos, y tanto más los Pastores del Pueblo de Dios .

III
PRIMACÍA DEL AMOR EN EL SEGUIMIENTO DE CRISTO: ¡APACIENTA MIS CORDEROS!

Volvamos ahora a invocar al Espíritu para que nos enseñe el sentido de la Escritura para que lo realicemos hoy, en esta celebración, que Él nos explique todo (Cf Jn 14, 26). Y todo se explica en el mandamiento clave: en el precepto-clave, que Jesús afirma en el Evangelio de Juan (13:34,35): “Este es mi precepto, que ustedes se amen los unos a los otros como Yo los he amado.” Clave para preservarnos de la arrogancia… como reza el Salmo de hoy, y clave también de las exigencia inmediata de dicho Amor: el seguimiento.

El Señor nos dice a todos, en especial a los Pastores, y especialísimamente al Padre Atilio Rosatte, nuevo cura párroco de esta comunidad de Santiago del Baradero, como dijo a Pedro, «Tú sígueme» (Juan 21: 15-22). Tú sígueme, -nos exhorta-sígueme por Amor, sígueme sin poner la mano en el arado y mirar luego atrás, como arrepintiéndote, sígueme sin reservas, sígueme sin dejarte escandalizar, sígueme con confianza, aunque sea entre los oleajes de las aguas del lago…

Podemos hacer nuestro el pedido que el Señor hizo a Pedro, todos los fieles cristianos, en tanto miembros del Pueblo Sacerdotal y «corresponsables» de la fe, en la Iglesia, pero de modo especial y distinto para los Pastores del Pueblo de Dios; ese pedido que, en el Evangelio, Jesús formula en Jn 15:12: “Simón, hijo de Juan, ¿me amas más que éstos? El le dijo: Sí, Señor, tú sabes que te amo. Le dijo: Apacienta mis corderos”.

¿Podríamos dejar de reflexionar sobre ese pedido hoy, aquí, nosotros, quienes estamos en esta celebración?. ¿Somos capaces de seguir a Cristo, acatando lo que Él nos muestra hoy, a nosotros, para hacer dentro de Su Iglesia, observando, sin envidias, sin temores, más aún, con alegría y esperanza, las misiones o funciones que Él, el Cristo, como Cabeza de Su Iglesia, nos encomienda para realizar?. ¿Confiamos de verdad en que el Espíritu Santo santifica la iglesia, cuya Cabeza es Jesucristo?. Él nos ama a todos y a cada uno de nosotros nos tiene asignada una función que cumplir dentro de Su Cuerpo. Él es quien tiene, por ser Verdadero Dios y Verdadero Hombre, la Autoridad y el Señorío, dado así que toda autoridad en la Iglesia proviene de Él, en y desde su Espíritu que la anima, como su alma. Él nos confiere en su Iglesia un ministerio, una función, cada uno según su vocación y elección, como dice San Pablo, para el perfecto funcionamiento del cuerpo, para bien y edificación de todos, para aliento y crecimiento de toda Su iglesia, Cuerpo a la vez sufriente y glorioso de Cristo, muerto y resucitado. Éste es también un aspecto de nuestra Fe para la cual tenemos que pedir la gracia del aumento y la fortaleza.

Padre Atilio: el sucesor de los Apóstoles, los sacerdotes, y el pueblo católico aquí presente, te decimos:

¡Apacienta a los corderos!
¡Apacienta a los corderos!
¡Apacienta a los corderos, que no son «tuyos» de propiedad, son los de Cristo, y que hoy te son confiados, encomendados, para que los ames sin reservas!. En eso se verificará tu seguimiento al Señor: ¡Tú sígueme!; eso quiere decirte hoy el Espíritu, que habla a la Iglesia.

Padre Atilio: descubrí y hacé descubrir a todos la belleza de la parroquia como «casa y escuela de comunión» y como «comunidad de comunidades», en el sentido en que lo decía San Jerónimo: en el «ser Iglesia», que es «el nosotros» de la fe, según las palabras de este santo Doctor y especialista en la Sagrada Escritura.

La Virgen Madre, nuestra Madre, Madre de la Iglesia, Madre de los Apóstoles, te acompañe en esta misión, en su advocación de Nuestra Señora de Luján, Patrona de nuestra patria y de nuestra diócesis, y de Nuestra Señora del Pilar, tan vinculada con Santiago el Mayor, el Apóstol, Patrono de estas tierras y de esta parroquia.

Así sea.

+Oscar Sarlinga
Sábado 26 de septiembre de 2009

FIESTAS PATRONALES DE «NTRA SRA DEL ROSARIO DE SAN NICOLÁS» EN LA CAPILLA HOMÓNIMA DE LA LOCALIDAD DE «DEL VISO»

El día 25 de septiembre una verdadera multitud se congregó en la iglesia dedicada a Nuestra Señora del Rosario, con la imagen de la Virgen del Rosario de San Nicolás, en la localidad de Del Viso, en el sector de dicha localidad dentro de la jurisdicción de la parroquia de Santa Rosa de Lima, de Manuel Alberti (Partido de Pilar). La capilla está ubicada sobre ruta 26, a 4 cuadras de la Autopista Panamericana Ramal Pilar.

El cura párroco de la parroquia de Santa Rosa de Lima es el R.P. Tomás Llorente y el responsable pastoral directo de la Capilla de Ntra. Sra. del Rosario de San Nicolás es el Pbro. Gabriel Micheli.

Miles de feligreses, e incluso de peregrinos, pasaron durante todo el día por la capilla (que en realidad es una hermosa y amplia iglesia, que cuenta con todas las infraestructuras pastorales adyacentes). Se escucharon confesiones durante la jornada, habiendo estado los padres de la parroquia a disposición a tal efecto.

El día 25 fueron celebrados dos misas más, antes de la misa central, una a las 11:00 y otra a las 16, con el templo lleno. A las 18:30 comenzó la procesión con la imagen por las calles de los barrios circundantes.

Luego de la significativa y participativa Novena, en la que se consideraron distintos temas del Año Sacerdotal convocado por S.S. Benedicto XVI, como hemos dicho, tuvo lugar el día de la celebración, el día 25, cuya Misa central, a las 19.30, fue presidida por el Obispo diocesano, Mons. Oscar Sarlinga y concelebrada por el R.P. Tomás Llorente, Mons. Edgardo Galuppo, el Pbro. Gabriel Micheli, el R.P. José Luis, msf, el R.P. Ramón Carrizo, msf, Mons. Marcelo Monteagudo, y los Pbros. Oscar Iglesias (Decano de Pilar) y Albino Cabral (cura párroco de San Manuel Mártir, de La Lonja). En dicha celebración el Sr. Obispo bendijo las coronas (traídas del Santuario de San Nicolás y ellas mismas réplicas de las originales) con las cuales el R.P. Tomás Llorente y el Pbro. Gabriel Micheli coronaron las imágenes de la Ssma. Virgen y del Niño Jesús.

La misa de 19:30 fue transmitida por FM Santa Rosa 90.3 y FM Santa María 89.3 Matheu.

Para el momento de la bendición de las coronas, el Obispo pronunció la siguiente oración

ORACIÓN A LA VIRGEN MARÍA EN SU ADVOCACIÓN DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO

Virgen María, Nuestra Señora del Rosario, en tus manos ponemos nuestras alegrías y esperanzas, y también las tristezas y sufrimientos de todos tus hijos. Implora sobre los Obispos y Presbíteros los dones del Espíritu, para que, fieles a las promesas sacerdotales, seamos infatigables mensajeros de la Buena Nueva, especialmente entre los más pobres y necesitados, y en particular en este Año Sacerdotal, que ha convocado el Sucesor de Pedro. Infunde en los religiosos y religiosas el ejemplo de tu entrega total a Dios, para que, en el servicio abnegado a los hermanos, los acompañe tu protección en sus trabajos y necesidades.

María, Madre de la Iglesia, alienta a los fieles laicos, haz que sean empeñosos en la «Nueva Evangelización», para que, con la promoción humana y la evangelización de la cultura, sean auténticos apóstoles en el Tercer Milenio.

Protege a todas las familias argentinas, y de nuestra diócesis de Zárate-Campana, para que sean verdaderas Iglesias domésticas, donde se custodie el tesoro de la fe y de la vida, donde se enseñe y se practique siempre la caridad fraterna.

Ayuda a los católicos a ser sal y luz para los demás, como auténticos testigos de Cristo, presencia salvadora del Señor, fuente de paz, de alegría, de esperanza. No dejes que nos gane el desánimo, el descorazonamiento ni la desidia. Danos fuerza y coraje, fortaleza evangélica y alegría potente en el corazón, incluso ante las adversidades y las enemistades. Te pedimos hoy, en especial, la salud de los enfermos y de todos los que sufren y lloran sin encontrar consuelo.

+++BENDICE, SEÑOR DIOS, ESTAS CORONAS CON QUE SERÁ CORONADA LA IMAGEN DE TU SANTÍSIMA MADRE, LA VIRGEN MARÍA, EN SU ADVOCACIÓN DEL NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO DE SAN NICOLÁS, Y LA IMAGEN DEL NIÑO JESÚS, QUE ELLA LLEVA EN SUS BRAZOS

Volvemos nuestro rostro hacia ti, Reina y Madre Santa, Patrona de nuestra Patria en tu advocación de Nuestra Señora de Luján, venerada hoy en tu advocación de Nuestra Señora del Rosario, ilumina a quienes rigen los destinos de nuestro país, salvaguardando los valores morales y sociales cristianos, para que nos ayuden a vivir las virtudes personales y sociales. Ayuda a todos y cada uno de tus hijos e hijas, para que, con Cristo Nuestro Señor, Verdadero Dios y Verdadero Hombre, caminemos juntos hacia el Padre, en la unidad del Espíritu Santo, empeñosos nosotros, todos, en la construcción de la Civilización del Amor y de la Paz, hacia la consecución de la «caridad en la verdad», Caritas in veritate, como nos lo ha pedido nuestro Papa Benedicto XVI.

Amén.

sábado, 26 de septiembre de 2009

En misa concelebrada fueron coronadas las imágenes de Jesús y de la Virgen del Rosario de San Nicolás

Barrio San Felipe:

Una verdadera Fiesta de fe y devoción se vivió ayer en el barrio San Felipe donde en su Capilla, se realizó la Misa concelebrada por el Sr. Obispo de la Diócesis Monseñor Oscar Sarlinga y los sacerdotes Edgardo Gallupo, P. Wilson, P. Alfonso, P. Rufino Gimenez, en el Día de la Virgen Nuestra Señora del Rosario de San Nicolás.


La numerosa cantidad de fieles devotos que asistieron y la hermosa tarde que acompañó motivaron que la santa Misa Fuera oficiada en el parque de la Capilla donde también se le dió realce a cada instancia del oficio religioso con participación de vecinos, de la empresa CMP que hiciera posible la construcción del templo,los cánticos religiosos con pegadisos ritmos, al guitarrista, a los chicos de los Jardines de Infantes, a las glosas, en fin, como fueran mencionando las chicas de la Iglesia, a todos quienes de una u otra manera están siempre presentes.


Un momento muy especial y emotivo fue el de la Coronación cuando les fuera colocada la coronita primero al Niño Jesús y luego a la Virgen que fue acompañado por aplausos de la concurrencia como también el rezo de la oración de la Virgen.

Luego de la Misa, se iniciaba la parte artística del programa preparado para la ocasión.

Fuente: La Autentica Defensa.
http://www.laautenticadefensa.com.ar/noticias.php?sid=67622

jueves, 24 de septiembre de 2009

MONS. OSCAR SARLINGA VISITA «EL REMANSO», EN LA JURISDICCIÓN DE LA PARROQUIA DE «LOS CARDALES», PARTIDO DE EXALTACIÓN DE LA CRUZ

El Obispo Mons. Sarlinga visitó la capilla «Madre de la Esperanza» del barrio «El Remanso» ubicado dentro de la jurisdicción de la parroquia de La Sagrada Familia, de Los Cardales, en el partido de Exaltación de la Cruz. Acompañado del cura párroco, Pbro. Claudio Caruso, celebró la misa este domingo, y se entretuvo largamente con los fieles, que muy numerosos concurrieron a la visita del Obispo.

El Remanso se trata de una tradicional urbanización, fundada hace 30 años, que se extiende a lo largo de la Ruta N°8 desde el Km.70 hasta el Km. 75, y que abarca unas 500 hectáreas. Originariamente perteneciente a particulares, fue loteado al momento de la creación de la población, habiéndose transformado en una pequeña localidad y urbanización en forma de Barrio Parque, con una población, según el Indec 2001, de 1.266 habitantes, incluyendo Barrio Los Pinos y Barrio Parque Exaltación, aunque recientes cálculos estiman casi el doble.

La capilla «María Madre de la Esperanza» se encuentra ubicada ena en "El Guardamonte" y "La Cortejada", y se celebra la misa allí todos los domingos. El Padre Nestor Menéndez, recientemente fallecido, fue el fundador e impulsor principal de la Capilla, habiendo comenzado con un lugar de esparcimiento para que los feligreses de su parroquia de Ntra. Sra. de Fátima, de Belgrano (Buenos Aires) pudieran ir los fines de semana. La primera misa en el lugar, a pedido de los fieles, se celebró en enero de 1975. En 1978 se ampliaron las instalaciones de lugar y luego se hizo una cruz con ladrillos de vidrio. A partir 1979 se fomentaron las reuniones de familias, de catequesis, retiros espirituales y campamentos juveniles. Con el correr del tiempo se formó una comisión «pro templo» y comenzó a construirse el tempo, hasta que en 1984/5, con la colaboración del arquitecto Paul Amette se efectúa un proyecto integral, que culminó con en 1988, convirtiéndose en el único templo católico a lo largo del trayecto de la Ruta N°8 entre Fátima y San Antonio de Areco. La inauguración de la capilla tuvo lugar el 11 de Octubre de 1988, con la imagen de la Ssma. Virgen, traída desde Buenos Aires por Mons. Leaden y transportada con honores a su llegada a la entrada del pueblo. La iglesia fue solemnemente bendecida por Mons. Leaden.

Luego de referirse al Evangelio del día, al sentido de la Pasión de Jesucristo y al «hacerse como niños», con sencillez y humildad, para poder recibir en plenitud la Palabra de Dios y dejarse transformar por la gracia divina, el Obispo mencionó algunos trazos fundamentales del Plan Pastoral diocesano, promulgado en junio de este año, del cual recordó que, como iglesia particular, la diócesis de Zárate-Campana quiere afianzar la herencia de gracia y bendición que trajo la entrada en el IIIer. Milenio, poniendo el corazón en Jesucristo, el que hace nuevas todas las cosas (a cuyo Corazón fue consagrada la diócesis el 9 de mayo de 2009 en la iglesia co-catedral de Belén de Escobar). Y dijo que, conforme al Plan Pastoral, en ese «sentir con la Iglesia» es como tenemos que vivir nuestro cristianismo, cada día más y mejor, profundizando en el Evangelio de Jesucristo, como nos refiere el Papa Benedicto XVI en Deus Caritas est: "Ahora nos toca recoger la herencia jubilar, tomar conciencia de que lo importante no es tanto hacer "programas nuevos", sino vivir la novedad permanente del evangelio...". Mencionó también el Obispo que ello “(…) queremos hacerlo en fidelidad a la Iglesia, en comunión orgánica dentro de ella, con el Papa, Obispo de Roma y sucesor de San Pedro”, el cual como dice la Lumen gentium "(…) es el principio y fundamento perpetuo y visible de unidad, tanto de los Obispos como de la muchedumbre de los fieles"(LG 23). Refiriéndose a la comunión, mencionó que la comunión eucarística, que recorre y dinamiza la vida de la Iglesia, es también principio y norma de actuación, y que esto, cual criterio de verdad, responde a una actitud interior, y a una mística específicamente evangelizadora, la cual está íntimamente relacionada con la virtud de la esperanza (Cf. Plan Pastoral Diocesano, n. 2. “Nuestro Plan Pastoral dentro de la «caridad pastoral» de la Iglesia”). Pidió, por fin, a la Madre de la Esperanza, la Santísima Virgen María, que nos lleve a asumir verdaderamente la «nueva evangelización» a la que nos ha llamado la Iglesia, para ser, cada uno según su vocación y elección, y en su ambiente, continuidad de la presencia de Cristo en medio de los suyos.

Al término de la ceremonia, el Obispo entronizó en el templo un cuadro de Jesús Misericordioso que donó a la capilla, como recuerdo de su primera visita.

lunes, 21 de septiembre de 2009

EVANGELIZACIÓN Y CIVILIZACIÓN

SENTIDO Y FINALIDAD DE LA TERCERA MISIÓN JUVENIL DIOCESANA

Luego de las Misiones en Baradero (2007) y en Escobar (2008) durante los días 2, 3 y 4 de octubre (2009) la comunidad Parroquial de la Catedral Santa Florentina será la anfitriona de la III Misión Juvenil Diocesana, bajo el lema “Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? (Mc. 10, 17)”. Este acontecimiento diocesano es de gran importancia para la diócesis porque expresa su deseo de misión.



La «Misión Joven» diocesana, se encuentra en el contexto de nuestra opción por la comunión y la misionariedad, que han quedado plasmados en nuestro «Plan Pastoral diocesano», el cual, en la INTRODUCCIÓN, I: «ORIENTACIÓN FUNDAMENTAL del PLAN» nos habla en primer lugar de la dimensión «discipular» a la que nos llama el Documento de Aparecida, a saber:

“En este sentido, dicho Documento de Aparecida nos lleva a ver en dicha pastoral orgánica una dimensión discipular: "Una dimensión constitutiva del acontecimiento cristiano es la pertenencia a una comunidad concreta, en la que podamos vivir una experiencia permanente de discipulado y comunión con los sucesores de los Apóstoles y con el Papa”.

La «conversión a Jesucristo» es fundamental para redescubrir el sentido de la misión; por esta causa sigue diciéndonos nuestro «Plan»:

“A los fines de asegurar la vitalidad de esta pastoral ordinaria y orgánica sobre todo hemos de retomar con energía el proceso de la reforma y conversión de nuestras parroquias, procurando su renovación en profundidad y en ámbito evangelizador, aprovechando la totalidad de sus potencialidades pastorales para llegar efectivamente a cuantos le están encomendados, asumiendo de modo decidido y convencido un «estado permanente de misión», en primer lugar dentro de su propio territorio”.

Por supuesto, tenemos una historia, y la vocación por la dimensión misionera de toda la pastoral hemos venido trabajándola en las distintas instancias de nuestra Iglesia local desde hace más de tres años. En nuestro «Plan Pastoral» (en el capítulo I: «EL CAMINO PASTORAL RECORRIDO NOS ORIENTA, Y NOS ALLANA EL CAMINO POR RECORRER»), en el n. 2, se nos brindan «Orientaciones programáticas efectivamente realizadas y re-asumidas en este Plan Pastoral», entre las cuales las siguientes:

-La Misión como una necesidad permanente y una actitud necesaria para la evangelización de nuestra diócesis.
-El impulso de la Pastoral de Juventud y Pastoral Vocacional
-El apoyo a los Movimientos eclesiales en la diócesis y a su integración en la Pastoral orgánica.

Asimismo, en el capítulo I, n. 7, cuando se habla de la profundización en la dimensión evangelizadora de toda la Pastoral, se nos recuerda a todos que “(…) el Proyecto pastoral debe profundizarse aún más al considerar el aspecto evangelizador, el objetivo de lograr una DIÓCESIS MISIONERA. También en ese sentido, el «camino recorrido», o la misma realidad eclesial vivida, tiene mucho para proponernos.

Ya se había reflexionado sobre la necesidad de la misión entendida en primer lugar hacia dentro de la misma comunidad diocesana. Ése es el sentido del llamado "estado de misión".

En el Mensaje que nos dirigió nuestro Obispo con motivo de la apertura del «Año Paulino Jubilar» nos decía nuestro Pastor:

"Este tiempo de gracia es ocasión propicia también para que reflexionemos en la relación esencial entre justicia y caridad, virtudes inseparables, tema al cual el Papa le ha dedicado una especial consideración en la segunda parte de su Encíclica «Deus Caritas est». No existe caridad sin justicia. Al mismo tiempo, el cristiano está llamado a buscar siempre la justicia, llevando dentro de sí el impulso superador que proviene del Amor, que supone la justicia y la trasciende. Reaprender a ser justos, a compartir, a crear condiciones de justicia y paz, implica abrir el corazón a Dios y a los hermanos. Que sea éste un tiempo en que podamos ver cómo la fe abre puertas extraordinarias al trabajo por un orden justo en la sociedad, a una «caridad social» rectamente entendida y aplicada, y en particular en lo referente a los fieles laicos, en la participación personal en la vida pública, cooperando con los demás ciudadanos" (Carta pastoral del Obispo con motivo del Año Paulino")

Ahora entonces, fijémonos en la referencia concreta que hace el «Plan Pastoral diocesano» a las misiones juveniles (capítulo I, n. 7):

“La propuesta y puesta en práctica de las «misiones juveniles» llevadas a cabo en distintas ciudades y localidades de la diócesis por parte de grupos de jóvenes misioneros ha tenido una importancia clave en el conocimiento mutuo, en el amor por el sentido de la misión, y en la revitalización de comunidades católicas que hasta ahora habían sido visitadas más bien por otros grupos religiosos o incluso por sectas”.

Conjugando la Pastoral Litúrgica, con la de Juventud, con la Pastoral misionera, la vocacional y la caritativa institucional, fueron planificadas las misiones juveniles en el mismo lugar, ciudad o partido donde iban a ser celebradas las Fiestas Patronales diocesanas (en torno al 8 de mayo), día en que se viene llevando a cabo una entera «Jornada Pastoral», compuesta principalmente por la dimensión catequística, juvenil y caritativa”.

Todo un programa de vida y de vida misionera. Pongamos aquí nuestro corazón, para que tantos hermanos se encuentren con la Palabra de Jesucristo, con la Eucaristía, que se reconcilien con el Señor y con la Iglesia, que es el Cuerpo de Cristo y Pueblo de Dios, que se reconcilien con el Amor con el que Dios nos amó, y dén de ese Amor a los demás, para construir una sociedad nueva.

Es un desafío para los jóvenes, especialmente, que todo lo que demos de nosotros, lo demos con todo el corazón, recordando a SAN AGUSTÍN, Obispo y Doctor de la Iglesia:

“Quien da todo, da mucho, aunque sea poco,
quien no da todo, da poco, aunque sea mucho”.


Con respecto a la MISIÓN y a la MISIONARIEDAD, nuestro Obispo ha hecho incesantes referencias, y gestos concretos, desde su inicio del ministerio en diócesis.

Hemos recogido algunos textos, tanto del propio Obispo como de medios periodísticos, cuya lectura nos ayudará a rehacer el itinerario de los gestos concretos de misión, desde 2006 en adelante, y la profundización de la dimensión misionera de toda la pastoral.

I
Referencia de Mons. Oscar Sarlina al rol fe la Iglesia en la construcción de un «mundo nuevo» con la «perenne novedad del cristianismo» en la celebración de las Fiestas Patronales de la Exaltación de la Cruz

Capilla del Señor, 14 de septiembre de 2009, (Diócesis de Zárate-Campana)

Consultar:
http://74.125.113.132search?q=cache:pO2xnYY6lKoJ:zaratecampanaobispado.wordpress.com/+misi%C3%B3n+diocesana+Sarlinga&cd=99&hl=es&ct=clnk&gl=ar

“La caridad es amor recibido y ofrecido”1, frase que, en cierto sentido, resume el Misterio de la Cruz en nuestras vidas, puesto que el sufrimiento reproducido en el Cuerpo místico de la Iglesia por la muerte de Cristo, es contribución a la redención de la humanidad, en la caridad, y aseguran la participación en la gloria del Resucitado, el mismo Jesucristo. De ese modo, desde el interior de nuestra vida, el mundo es consagrado a Dios en el Amor2.
Esto nos deja un gran mensaje. ¡Y un gran mensaje de esperanza!. La caridad verdadera, efectiva, transformadora, la caridad como virtud teologal realizada y vivida hace que nuestra relación con el mundo de hoy no sea mundanidad o puro naturalismo, sino expresión del Amor y de la misión de Cristo. Esta caridad realizada y vivida es raíz de esperanza, tan necesaria, esperanza que siempre resurge, incluso cuando los frutos exteriores de nuestro esfuerzo y de nuestro trabajo se vean escasos, o falten del todo. Nuestra vida cristiana, más que por las obras externas, aunque éstas son importantes, y muy importantes, se hace fecunda sobre todo por el Amor de Cristo, que nos impulsa a la donación total de nosotros mismos, en las condiciones de la vida común de cada día.
¿Podríamos dejar de ver que esta donación por Amor se hace tanto más necesaria en nuestro tiempo?. Porque son tiempos en los que la humanidad se encuentra en un momento crucial de su propia historia. Más que un «mundo nuevo» (porque ya hace siglos que se habla de un «mundo nuevo» que está surgiendo) surgen nuevos aspectos de un «mundo viejo» tanto más necesitado de la perenne «novedad» del cristianismo, que hace nuevas todas las cosas. Es verdad que las personas buscan nuevas formas de pensamiento y de acción, muchos están convencidos de una autosuficiencia sin la fe y sin la gracia divina, a nadie escapa que existe cierto trágico divorcio entre la fe y la vida vivida, e incluso entre pensamiento científico y crecimiento en la fe, en la fe en el Dios viviente. Esto no tiene porqué ser así, forma parte de la relación entre el orden natural y el orden sobrenatural. La Iglesia católica, pensándose a sí misma respecto de su misión ante el mundo y la sociedad, se vio como “sacramento universal de salvación”, con plena conciencia de que no se puede dar plenitud humana sin la gracia, sinel Verbo de Dios, que “(…) es el fin de la historia humana, el punto focal de los deseos de la historia y de la civilización, el centro del género humano, la alegría de todo corazón, la plenitud de sus aspiraciones”3.

1 BENEDICTO XVI, Enc. Enc. Caritas in veritate, n. 5.
2 Cf CONC. ECUM. VAT. II, Const. dogm.Lumen gentium, 34.
3 CONC. ECUM. VAT. II, Const. past. Gaudium et spes, 45.

II
Culminó la primera fase de la “Misión Campana”

Campana (Buenos Aires), 3 Oct. 07 (AICA)

Misión en Campana
La festividad de San Vicente de Paúl, que se trasladó al domingo 29 de septiembre, fue el escenario elegido para clausurar la primera fase de la “Misión Campana”, a la que el obispo de Zárate-Campana, monseñor Oscar Sarlinga convocó después de la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe en Aparecida (Brasil), pidiendo poner a la Iglesia en esa ciudad-sede del obispado en estado de misión. La primera y última misión general que se realizó en esta ciudad del nordeste bonaerense se realizó en 1979, a poco más de tres años de creada la diócesis por Pablo VI, en 1976. El prelado recordó que esa primera etapa se desarrolló en Ariel del Plata, a cargo del grupo misionero de Maquinista Savio, cuyos coordinadores fueron el sacerdote Justo Rodríguez Gallego y el matrimonio D’Ambrosio. La segunda será la “Misión Joven”, por realizarse entre octubre y diciembre, y estará a cargo del grupo misionero Santa María de la Estrella, de Pilar, y del grupo juvenil de la catedral Santa Florentina, cuyo coordinador es el sacerdote Mauricio Aracena. La clausura de este tiempo de misión será el 8 de diciembre, en ocasión de la Inmaculada Concepción de la Virgen María. En tanto, la tercera fase, también Misión Joven, está prevista para marzo de 2008. Treinta laicos y dos sacerdotes Por pedido de monseñor Sarlinga, el grupo misionero estable de la parroquia de la Inmaculada Concepción de Maquinista Savio, localidad entre los partidos de Pilar y Escobar, acudió a la misión permanente en la localidad de «Ariel del Plata», en las afueras de la ciudad de Campana, en la jurisdicción de la parroquia de San Vicente de Paúl. El grupo está integrado por treinta laicos y dos sacerdotes. El párroco y vicario episcopal para la Pastoral diocesana, presbítero Justo Rodríguez Gallego, y el vicario parroquial, presbítero Nicolás Guidi. Todos ellos visitaron casa por casa la zona y los barrios aledaños La misa de clausura, a la que asistieron numerosos fieles, fue concelebrada por monseñor Edgardo Galuppo, vicario general; el sacerdote Marcelo Monteagudo, delegado episcopal para las Misiones; el sacerdote Ariel Guzmán, administrador parroquial, y el sacerdote Nicolás Guidi, vicario parroquial de la Inmaculada Concepción de Maquinista Savio. Monseñor Oscar Sarlinga exhortó, en la homilía, a la Iglesia en Campana a “recomenzar desde Cristo”, y recordó que, tras la V Conferencia, asumimos el llamado del papa Benedicto XVI a “ser de verdad discípulos y misioneros, considerando estos elementos como esenciales en la naturaleza propia del cristiano”. “Nos pertenece como vocación más profunda el gozo de evangelizar –destacó-, porque la evangelización, es decir, la actividad misionera, corresponde a la vocación específica de la Iglesia”. Finalmente, monseñor Sarlinga valoró que la Iglesia en Campana haya “recomenzado desde Cristo, porque así hemos hecho carne la misión en toda esta zona de Ariel del Plata, donde tuvo lugar esta primera fase, con muy buena acogida de las familias visitadas”.+

Homilía:

«IGLESIA EN CAMPANA, ¡RECOMIENZA DESDE CRISTO!»

Homilía de monseñor Oscar Domingo Sarlinga, obispo de Zárate-Campana la clausura de la Primera Fase de la «Misión Campana» (29 de setiembre de 2007))

Consultar:
http://aica.org/index2.php?pag=sarlinga070929

Queridos sacerdotes, grupo misionero, queridos hermanos y hermanas en el Señor
Habiendo celebrado la Iglesia en América Latina la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y el Caribe, en la ciudad de Aparecida en Brasil, del 13 al 31 de mayo del año 2007, bajo lema y tema: «Discípulos y misioneros de Jesucristo para que nuestros pueblos en Él tengan vida» (“Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida”, Jn. 14,6), acogimos también el llamado de nuestro Santo Padre Benedicto XVI, en sentido de ser de verdad discípulos y misioneros, considerando estos elementos como esenciales en la naturaleza propia del cristiano.
Nos pertenece como vocación más profunda el gozo de evangelizar, porque la evangelización, es decir, la actividad misionera, corresponde a la vocación específica de la Iglesia, la cual, en pleno respeto de la libertad de los hombres, les va al encuentro, en especial de aquellos que, en palabras de Juan Pablo II “(…) todavía "in umbra mortis sedent" (Lc 1, 79); al punto que puede decirse, siguiendo las palabras citadas, “(…)que la Iglesia es la misión encarnada” 1. Son palabras muy fuertes y que debemos hacer carne en nuestro corazón, uno de cuyos signos es la bendición del nuevo altar de esta iglesia parroquial, para el centro de la evangelización, la Eucaristía celebrada, que se haga vida misionera en nosotros. ¡Recomenzar desde Cristo!. Hemos hecho carne la misión en toda esta zona de Ariel del Plata, donde tuvo lugar esta primera fase, con muy buena acogida de las familias visitadas.
En efecto, si somos cristianos es porque, mediante el bautismo y la fe (no sólo la fe subjetiva sino la fe objetiva de la Iglesia) seguimos a Jesucristo, quien nos ha mandado: «Sígueme» (Mt 9,9). Desde esa perspectiva discipular, esto es, en tanto discípulos del Señor, hacemos nuestras las palabras del Apóstol de las Gentes: «Vivo yo, pero no soy yo, es Cristo quien vive en mí» (Gal 2,20) y queremos testimoniar la alegría de ser cristianos, dar testimonio de Cristo en el mundo, y concretamente en esta ciudad de Campana, con nuestras obras y palabras, con la vida de Amor de una Eucaristía celebrada y vivida.
Como sabemos, la última misión en la ciudad de Campana tuvo lugar en el año 1979, a cerca de tres años de la creación de la diócesis, en 1976, por el Papa Pablo VI. En el año 2006 la diócesis cumplió 30 años de vida, lo cual festejamos solemnemente el día de su Patrona, la Santísima Virgen en su advocación de Nuestra Señora de Luján, el 8 de mayo, en el atrio de la iglesia catedral, con numerosa participación de fieles. Un cambio es necesario, un cambio en el sentido de la «nueva evangelización» a la que nos llamó Juan Pablo II y que nos reitera hoy el Santo Padre Benedicto XVI.
En su reciente encuentro, en Loreto, con 500.000 jóvenes, el Papa Benedicto escuchó el testimonio de ellos y respondió a sus preguntas, a la par que se refirió a la dificultad de hablar hoy de Dios en el mundo actual, puesto que algunos ven en Él una limitación a su libertad. Ante los problemas de la sociedad actual, el Papa señaló que “(…) el mundo debe ser cambiado y es precisamente la misión de la juventud cambiarlo”. Pero cada uno no lo puede hacer con sus propias fuerzas, sino que sólo “(…) en comunión de fe y de camino, en comunión con María, con todos los Santos y con Cristo" como se puede "hacer algo esencial”2. Además destacó algo tan fundamental como la importancia de la familia, de la que todos nosotros hemos de hacer “(…) una célula fundamental de la sociedad” y también un «núcleo evangelizador».
¿Tenemos conciencia, como Iglesia local, de ser esencialmente misionera?. El Concilio Vaticano II confirmó explícitamente: “La Iglesia peregrinante es, por su naturaleza, misionera, puesto que toma su origen de la misión del Hijo y de la misión del Espíritu Santo, según el propósito de Dios Padre”3.
Hoy la misión es obra de caridad. Y no es privativa de algunos, sino de todo cristiano-discípulo, precisamente porque, como nos dijo el Papa en «Deus Caritas est», “(…) el amor al prójimo enraizado en el amor a Dios es ante todo una tarea para cada fiel...” 4.
Quisiera pedirles, desde el corazón, como un «espíritu de la misión en Campana», que «desde el Espíritu de Pentecostés, estemos siempre dispuestos a recomenzar». Caer y decaer es humano, recomenzar desde el Espíritu es divino.
En la clausura del inmenso acontecimiento de gracia que fue el Jubileo del Año 2000, el Papa Juan Pablo II nos decía, en la homilía de conclusión: «Es necesario recomenzar desde Cristo, con el impulso de Pentecostés, con entusiasmo renovado. Recomenzar desde él ante todo en el compromiso diario por la santidad, poniéndonos en actitud de oración y escucha de su palabra. Recomenzar desde él para testimoniar el Amor» 5
Y luego, al siguiente año, en 2001, nos dejó para la Iglesia universal una hermosa exhortación, que podemos hacer perfectamente nuestra hoy, en Campana, y en nuestra querida diócesis:

“Recomienza desde Cristo, tú que has encontrado misericordia.
Recomienza desde Cristo, tú que has perdonado y aceptado el perdón.
Recomienza desde Cristo, tú que conoces el dolor y el sufrimiento. Recomienza desde Cristo, tú que sientes la tentación de la tibieza: el año de gracia es un tiempo ilimitado.
Recomienza desde Cristo, Iglesia del nuevo milenio. Canta y camina”6.
La Virgen Madre, en su título de «Madre de la Iglesia» y en su advocación de Nuestra Señora de Luján, Patrona de la Argentina y de esta diócesis de Zárate-Campana, como le fuera asignada por el Papa Pablo VI, nos proteja y, como «Estrella de la Evangelización» nos haga siempre discípulos y misioneros de Jesucristo. Amén

Mons. Oscar D. Sarlinga, obispo de Zárate-Campana

III
PRIMER MISIÓN JOVEN DE CARÁCTER DIOCESANO

La Iglesia joven de Zárate-Campana misiona en Baradero

Baradero (Buenos Aires), 26Nov. 07 (AICA)

Consultar:
http://aica.org/index.php?module=displaystory&story_id=10195&edition_id=623&format=html&fech=2007-11-26

Misión en Baradero
La Iglesia joven de la diócesis de Zárate-Campana misionará los días 21, 22 y 23 de diciembre en la ciudad de Baradero, con el lema “Recibirán la fuerza del Espíritu Santo, que descenderá sobre ustedes, y serán mis testigos”. Los misioneros, organizados por la Secretaría Diocesana de Pastoral de Juventud y Vocacional, llegarán a esa ciudad bonaerense el viernes 21, a las 19, desde distintos puntos de la diócesis. Tras un encuentro de todos los jóvenes participantes, a las 17.30 comenzarán la misión, que consistirá en concentrarse para difundir el mensaje evangélico en lugares públicos. A las 22, se hará una Fiesta Joven, en la que se presentará la Banda de los Focolares. El domingo 23, a las 11, se oficiará la misa de clausura, en la que se realizará el envío misioneros de los grupos diocesanos que lo harán durante el verano.+

IV
MISIÓN JOVEN EN LOS CARDALES

29 Dic 2008
Alusión a la Misión Juvenil en las Fiestras Patronales de la Sagrada Familia, en Los Cardales, 2008

Consultar:
http://74.125.113.132/search?q=cache:U7Ax36H1aQ4J:blogs.clarin.com/oscarsarlinga/2008/12/29/fiestas-patronales-la-sagrada-familia-los-cardales-+II+misi%C3%B3n+joven+Baradero&cd=20&hl=es&ct=clnk&gl=ar

LA MISIÓN JUVENIL
A inicios de 2008, un grupo misionero de la parroquia San José Obrero, de Mercedes, llevó a cabo una “Misión Joven” en el radio parroquial de la Sagrada Familia, de Los Cardales. Allí, el sábado 12 de enero se celebró la misa de clausura, que estuvo presidida por el obispo de Zárate-Campana, monseñor Oscar Sarlinga, y a la que asistió una gran cantidad de fieles.
Concelebraron el entonces cura párroco de San José Obrero, presbítero Pablo Castelnovo (actual cura párroco de Villa Rosa); el delegado para las misiones, Mons. Marcelo Monteagudo; el administrador parroquial de San José Obrero (de Mercedes), presbítero Federico Lagoa; y el presbítero Sebastián Terráneo -de la arquidiócesis de Mercedes-Luján- quien acompañó a los jóvenes en la misión.
“Más bienaventurado es dar que recibir” fue el lema de la misión a la que el párroco convocó siguiendo los ejes pastorales de la diócesis para el trienio 2006-2009. Esta “Misión Joven” se inserta en el espíritu misionero que quiere dársele a la diócesis y que ya tuvo su expresión en 2006 con la misión en Maquinista Savio y la celebración en esa localidad de las fiestas patronales diocesanas. También los jóvenes del Movimiento Santa María de la Estrella junto con un grupo juvenil de la catedral condujeron una misión el año pasado en la ciudad de Campana; y la “Misión Joven” de diciembre de 2007, organizada por la Pastoral Juvenil diocesana, se llevó a cabo en Baradero.

V
EL AÑO PAULINO COMO TIEMPO PROPICIO PARA CONFIRMAR EN LA FE, CRECER EN EL TESTIMONIO DE VIDA Y AFIANZAR LA PERTENENCIA A LA IGLESIA


Consultar: http://www.fides.org/aree/news/newsdet.php?idnews=17160&lan=spa

AMERICA/ARGENTINA - Obispo de Zárate-Campana: "el Año Paulino es un tiempo propicio para confirmar en la fe, crecer en el testimonio de vida y afianzar la pertenencia a la Iglesia"

Zárate-Campana (Agencia Fides) - Mons. Oscar Domingo Sarlinga, Obispo de la diócesis de Zárate-Campana (Argentina) ha escrito una Carta Pastoral con motivo del inicio del Año paulino el próximo 28 de junio, que considera como "una oportunidad de reavivar nosotros la gracia de la unidad y de la evangelización".

Según explica Mons. Sarlinga "el objetivo del Año Paulino es profundizador y evangelizador, esto es, además de ser tiempo propicio para dar a conocer más y mejor la persona, ser, obra y acción del "Apóstol de las Gentes", lo es sobre todo para invitar a todos los creyentes en Cristo y a los hombres de buena voluntad a profundizar en el inspirado paulino mensaje de vida en Cristo, el mensaje de Salvación. Lo es para dejarnos hacer por Dios y su gracia, para producir una eclosión de fe, esperanza y caridad (sin olvidar la dimensión social de ésta, la solidaridad), en un mundo que tanto necesita de estas virtudes".

Así mismo es una ocasión propicia "para que reflexionemos en la relación esencial entre justicia y caridad, virtudes inseparables", pues no existe caridad sin justicia. Por tanto, recuerda el Obispo que este año de gracia 2008-2009 consistirá ante todo en un ponerse en la vía de «Jesús-Camino», siendo así "una ocasión privilegiada para la pastoral" para todos los agentes de la misma sacerdotes, religiosos o laicos, "con el fin de profundizar en el pensamiento de San Pablo y en la obra de la gracia en él" y "promover la lectura espiritual y los estudios acerca de las Cartas, paulinas", la cuales ayudarán a confirmar en la fe, crecer en el testimonio de vida de 'hijos de la luz' y afianzar la pertenencia a la Iglesia'. "Ello nos afianzará, al mismo tiempo – continua el Obispo en su Carta Pastoral - en nuestra misión como evangelizadores y en nuestro empeño por un ecumenismo verdadero y por un fructífero diálogo interreligioso, en la Justicia y en la Paz, en apertura amorosa al Espíritu del Señor".

A continuación presenta el Obispo el ser, pensamiento y acción de san Pablo destacando ante todo como su éxito en el apostolado "dependió sobre todo de un empeño personal en anunciar el Evangelio con total y valiente dedicación a Cristo, sin reparar en dificultades y peligros".

Y destaca así mismo su intima relación con Pedro, "la 'piedra' sobre la cual el Señor quiso edificar su Iglesia".

Concluye la Carta Pastoral señalando las principales celebraciones y actividades de la diócesis durante este Año Jubilar así como las iglesias y los días en que se podrá lucrar las indulgencias concedidas por el Santo Padre para el Año Paulino. El Obispo abrirá el Año Paulino el 28 de junio por la tarde en la única iglesia de la diócesis (creada en 2007) que tiene el 'título de los Apóstoles': la parroquia de Nuestra Señora de Luján y de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, en la ciudad de Campana. La celebración de apertura se completará al día siguiente, el 29, con la consagración e inauguración de la nueva iglesia de peregrinos, dedicada a San José. Así mismo durante el año se realizaran diversos encuentros de oración, conferencias, actos, en algunos decanatos y el tradicional encuentro judeo-cristiano con las comunidades de las ciudades de Zárate y de Campana. Sin olvidar la misión joven que se realzará en Belén de Escobar en el mes de septiembre y estará especialmente impregnada del espíritu paulino. (RG)

(Agencia Fides 23/6/2008)

VI
Referencia a la «misión urbana» en la misa de toma de posesión del primer cura párroco de San Manuel Mártir, en Pilar

Pilar (Buenos Aires), 3 Feb. 09 (AICA

“Luego monseñor Sarlinga comentó el sentido de la parroquia según el Documento de Puebla (“comunidad de comunidades”) y el pedido de la misión urbana en los documentos de Santo Domingo y Aparecida, “sobre todo en un partido como Pilar -dijo-, que cuenta con 280.000 habitantes y que significa para nosotros un desafío pastoral”. Dijo también que “con la diócesis en estado de misión queríamos ponernos en sintonía con la solicitud del papa Benedicto XVI en su discurso inaugural en Aparecida, y que dicha misión diocesana había dado muchos y numerosos frutos, que se transformarán en bendición para nuestras familias y comunidades”.

VII
VI ENCUENTRO DIOCESANO DE JÓVENES

Consultar:
http://jovenescatedral.blogspot.com/
lunes 4 de mayo de 2009

Con alegría nos acercamos al "VI Encuentro Diocesano de Jóvenes". Esperamos que la información les haya llegado a todos y la hayan difundido (por las dudas se las vuelvo a adjuntar).

Estamos cada vez más convencidos que esta experiencia es fruto de la acción del Espíritu Santo y que es el Buen Pastor que quiere reunirnos "para estar con él y enviarnos a predicar" (Mc 3, 13). Así lo hizo al comienzo de su ministerio público y al final cuando envía el Espíritu a la comunidad reunida para transformarla en misionera (Jn 20,21-22).

Hoy se renueva esta experiencia: comunión y misión. Experiencia de nuestras pequeñas comunidades juveniles y de su trabajo misionero que realizan en sus lugares. Experiencia de amor y de lucha por llevar el Evangelio a todos, especialmente entre sus pares. Es la hermosa experiencia de vivir la Iglesia en estado de misión permanente.

Esto lo expresamos extraordinariamente como iglesia joven reunida junto a nuestro Obispo, imagen del Buen Pastor que nos convoca, dos veces al año: en el Encuentro y en la Misión Diocesana de Jóvenes.

Este año, además realizar el encuentro en el marco de la fiesta de Nuestra Patrona la Virgen de Luján, el Obispo consagrará nuestra diócesis al Sagrado Corazón de Jesús. Esta consagración nos ayuda a renovar la consagración de nuestras vidas que comenzó el día del bautismo; nos invita a estar más unidos e identificados con Jesucristo, deseando tener los sentimientos de su corazón. Queremos, a partir del encuentro con el Corazón Amante de Jesús, salir al mundo para construir la civilización del amor.

Para que puedas meditar personalmente y en comunidad, e ir entrando en clima para el 09 de mayo, te adjunto la carta que nos dirigió Mons. Oscar acerca del Sagrado Corazón de Jesús.En la espera de que podamos vernos aquel día y permaneciendo unidos en la oración, te envío un abrazo fraterno y bendiciones.

VIII
CELEBRACIÓN SOLEMNE EN LA CO-CATEDRAL LUEGO DE LA II MISIÓN JOVEN EN ESCOBAR

Consultar: http://www.168horas.com.ar/080603/080603_60.htm

“El mismo decreto en nombre del Papa concede al Obispo diocesano, Monseñor Oscar Sarlinga, las facultades de su ejecución, es decir decidir acerca de la fecha de su publicación, anuncio al clero y al pueblo cristiano, y asimismo el acto en el cual se dará por cumplido el encargo, para lo cual el Obispo eligió el día viernes 30 del corriente mes de mayo, festividad del Sagrado Corazón de Jesús, durante la Misa que presidió en la nueva co-Catedral. Oportunidad en la que se labró y firmó el acta oficial. Cabe destacar que, la solemnidad mayor será celebrada en el mes de septiembre, luego de la «misión joven» que se realizará en la ciudad, la cual precederá a la celebración de las fiestas patronales diocesanas en mayo del 2009, en la iglesia CoCatedral de la Natividad”.

IX
MUCHAS BENDICIONES ESPERAMOS DE LA CONSAGRACIÓN DE LA DIÓCESIS AL SAGRADO CORAZÓN


DOMINGO DEL BUEN PASTOR

Mensaje de monseñor Oscar Domingo Sarlinga, obispo de Zárate-Campana, con motivo del Domingo del Buen Pastor (30 de abril de 2009)

Consultar:
http://www.aica.org.ar/aica/documentos_files/Obispos_Argentinos/Sarlinga/2009/2009_04_30.html

“Muchas bendiciones esperamos de la CONSAGRACIÓN DE NUESTRA DIÓCESIS AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS, para que Él nos dé «pastores según su corazón». Un servidor les decía, el pasado año: “Como comunidad diocesana, la Fiesta de Nuestra Señora de Luján, Patrona de nuestra diócesis, la celebraremos este año, el sábado 3 de mayo, en Santiago del Baradero, cuya parroquia matriz cumple 370 años. Hemos cumplido así con una de las primeras propuestas del consejo presbiteral y del consejo pastoral, habiendo celebrado la Fiesta patronal diocesana en la iglesia catedral de Santa Florentina (2006), en la Inmaculada Concepción de Maquinista Savio (2007) y en este 2008, en Santiago del Baradero. Todo ello cual signo de la unidad diocesana. Dios mediante, en 2009 será celebrada en la Natividad del Señor, de Belén de Escobar, precedida por la «misión joven», como hemos venido haciéndolo desde 2007” (3). Este año tenemos la gracia de consagrar nuestra Iglesia particular al Corazón de Jesús, todavía dentro del Año Paulino Jubilar, y a poco de Comenzar el AÑO SACERDOTAL, a que ha convocado nuestro Papa Benedicto XVI”.

X
HOMILÍA EN LAS FIESTAS PATRONALES DIOCESANAS Y CONSAGRACIÓN DE LA DIÓCESIS AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS

Consultar: http://74.125.113.132/search?q=cache:sO8c03pR_kQJ:blogsporlafe.org/%3Fq%3Dnode/84+II+misi%C3%B3n+joven+Escobar&cd=4&hl=es&ct=clnk&gl=ar

(III) PEREGRINANDO CONCRETAMENTE EN LA VÍA DE JESÚS-CAMINO EN NUESTRA DIÓCESIS En razón de la futura consagración al Sagrado Corazón, ya hoy, a inicios de la Semana Santa, nos preparamos para la Festividad de Nuestra Señora de Luján, Patrona de la Argentina y Patrona de esta diócesis de Zárate-Campana (con sus partidos de Belén de Escobar, Campana, Zárate, Pilar, Exaltación de la Cruz, Santiago del Baradero y San Antonio de Areco). La festividad será celebrada en esta iglesia co-catedral de la Natividad del Señor, de Escobar, el sábado 9 de mayo a las 16. Durante la mañana, habrá tres áreas de reflexión, trabajo y festividad: I. La Pastoral Juvenil y la Delegación de las Misiones; II. La Delegación de Catequesis; III. Caritas y la Pastoral Penitenciaria. Al final de la Misa, ese 9 de mayo, consagraremos nuestra diócesis al Sagrado Corazón de Jesús, de manos de María, Nuestra Madre de Luján. Lo hemos reflexionado durante tres años, junto con el Consejo Presbiteral, el Consejo Pastoral, y distintos organismos diocesanos, sacerdotes, religiosos, religiosas, laicos, seminaristas. Esta previsión ha de hacernos crecer en la caridad compartida, no menor es la participación en la «caridad institucionalizada de la Iglesia». Por ello nos preparamos también para la colecta de Caritas, con el lema: «Es posible. Tu solidaridad transforma. Compartir nos hace bien», que tendrá lugar el sábado 28 y el domingo 29 de mayo de este 2009. Hay hermanos nuestros que sufren, como decía Juan Pablo II en la exhortación Christifideles laici[8] “El hombre está llamado a la alegría, pero experimenta diariamente tantísimas formas de sufrimiento y de dolor”. A ese respecto, agregaba luego el citado Papa, refiriéndose al sínodo de 1987: «Ustedes, los abandonados y marginados por nuestra sociedad consumista; ustedes, enfermos, minusválidos, pobres, hambrientos, emigrantes, prófugos, prisioneros, desocupados, ancianos, niños abandonados y personas solas; ustedes, víctimas de la guerra y de toda violencia que emana de nuestra sociedad permisiva: la Iglesia participa del sufrimiento de ustedes, que conduce al Señor, el cual los asocia a su Pasión redentora y los hace vivir a la luz de su Redención. Contamos con ustedes para enseñar al mundo entero qué es el amor. Haremos todo lo posible para que encuentren el lugar al que tienen derecho en la sociedad y en la Iglesia»[9] El dolor es salvífico si nos unimos a la Pasión de Cristo. Al mismo tiempo, es verdad también que no es voluntad de Dios que sus hijos vivan situaciones sub-humanas, de cualquier orden que fuere. Por eso tenemos que poner la mente, el corazón y el hombro, para hacer cada día una sociedad más justa y más digna del ser humano. Pues, si una parte del mundo se siente extraña al cristianismo, el cristianismo no se siente extraño al mundo en absoluto, antes bien, la misión del cristianismo en medio de la humanidad es una misión de amistad, de comprensión, de ánimo, de promoción humana integral, de elevación: es decir, una misión de salvación, en camino a la salvación eterna, que ya ha llegado con la presencia del Reino. Para lo cual, tenemos que ponernos a hacer lo que Él, el Señor, nos diga, desde la fuerza de la Eucaristía, que nos adentra en el acto oblativo de Jesús; es de ese modo como nos implicamos en la dinámica de su entrega[10], dejando que desde su interior, del cual brotan ríos de agua viva (Cf Juan 7, 38) vengan a nuestro interior sus mismos ríos de agua vivificante que nos hacen renacer. De tal modo, cuando Cristo resucitado se hace presente en la vida de las personas, de nosotros concretos, como seres de carne y hueso, y nos da su Espíritu (cf. Jn 20, 22), cambiamos completamente, llegando a ser de modo pleno nosotros mismos, elevados por la Gracia. Como San Pablo, citando una vez más su caso, puesto que festejamos su Año Jubilar, puesto que llegó a ser particularmente significativo su ejemplo: la luz que lo deslumbró en el camino de Damasco hizo de él un hombre más libre de lo que había sido; libre con la libertad verdadera, la del Resucitado ante el que había caído por tierra (cf. Hch 9, 1-30). Tenemos que leer los católicos la Sagrada Escritura, meditarla, degustarla. Les recomiendo mucho el Libro de los Hechos de los Apóstoles. La experiencia que vivió Pablo le permitió escribir a los cristianos de Roma: «Libres del pecado y esclavos de Dios, fructifican ustedes para la santidad; y el fin, la vida eterna» (Rm 6, 22).

XI
MENSAJE DEL OBISPO CON MOTIVO DEL INICIO DEL AÑO SACERDOTAL CONVOCADO POR EL SANTO PADRE

Consultar: http://www.keegy.com/post/mensaje-del-obispo-con-motivo-del-inicio-del-ano-sacerdotal-convocado-por-el-santo-padre/

“La Iglesia hace la Eucaristía. La Eucaristía hace la Iglesia. Renovar y dar nuevas fuerzas a nuestro sentido eclesial será también una gracia. Más que «autorreferencia» se trata de profundizar en identidad y misión. La Eucaristía es el sacramento de la comunión cristiana; es el sacramento de la comunión, que realiza la unidad de cada uno de nosotros con Jesucristo, y, por tanto, obra el misterio de unidad entre nosotros, como comunidad participante del único Pan: “Ya que hay un solo pan, todos nosotros, aunque somos muchos, formamos un solo Cuerpo, porque participamos de ese único pan”, nos dice San Pablo (1 Cor. 10,17). Como diócesis, venimos trabajando el valor de la comunión y de la misionariedad como ejes de nuestro caminar como Iglesia. Precisamente, qué don precioso sería comprender también vivencialmente que la Eucaristía es el sacramento de la comunión y de la misión, una Eucaristía celebrada y vivida, una Eucaristía que hace que nuestra vida sea transformada, en la justicia, paz y gozo en el Espíritu.
Hay situaciones muy difíciles, es cierto. E incluso, a veces, casi abrumadoras. Veamos esperanza. Si lo pedimos con confianza, el Señor nos dará una nueva primavera de la misión sacerdotal, y una nueva primavera pastoral. Como el amor es difusivo de sí mismo, será éste un Año para redescubrir la belleza y la importancia del sacerdocio y de cada sacerdote, y para rezar y trabajar sin descanso por el aumento, perseverancia y santificación de las vocaciones sacerdotales, como lo pide el Señor en el Evangelio: “La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen al dueño de los sembrados que envíe trabajadores para la cosecha” (Mt. 9, 37-38). Ya hemos visto un resurgir de las vocaciones sacerdotales”.


XII
HOMILÍA EN CEREMONIA DE ORDENACIÓN SACERDOTAL


Consultar:
http://74.125.113.132/search?q=cache:UiP-LwOUzqMJ:homiliaszaratecampana.blogspot.com/2009/08/homilia-de-se-monsenor-oscar-sarlinga.html+Sarlinga+misi%C3%B3n+joven&cd=33&hl=es&ct=clnk&gl=ar

XIII
"SER DISCÍPULO ES UN DON DESTINADO A CRECER"

MENSAJE DE MONS. OSCAR D. SARLINGA A LOS CATEQUISTAS DE LA DIÓCESIS 17 de agosto de 2009

http://74.125.113.132/search?q=cache:lfz2NDUGIP0J:paginasarlinga.blogspot.com/2009/08/xmo-encuentro-diocesano-de-catequesis.html+misi%C3%B3n+diocesana+Sarlinga&cd=1&hl=es&ct=clnk&gl=ar

“Te espera aquí el apostolado como vicario parroquial, y como cooperador de la Delegación Diocesana de Pastoral de Juventud, que trabaja especialmente unida a la Delegación de las Misiones, por la «Misión Joven» con que procuramos reactualizar la nueva evangelización en el discipulado, para que nuestro pueblo tenga vida en Cristo, y la tenga en abundancia”.

Por eso, aceptando con gusto esta propuesta desde la fe, vamos a hacer una breve referencia a la catequesis en el proyecto pastoral diocesano y el trabajo de comunión orgánica con las otras pastorales (con aplicación concreta en las parroquias y colegios), y principalmente a la Catequesis e iniciación cristiana a la luz del Documento de Aparecida, el cual, de los últimos tiempos, es el Documento por excelencia de la Misión; esto es, la catequesis asumida como misión, juntos en nuestro caminar, para que nuestro pueblo, en Cristo, tenga vida. Es la razón por la que les propongo también nuestro recuerdo y renovado empeño en asumir renovadamente la misión continental, ante el «Tríptico de Aparecida» como catequistas del Pueblo de Dios. Sabemos que la Gran Misión Continental, para la cual la Conferencia Episcopal Argentina ha dejado a las distintas diócesis el «acto inicial» ha tenido su lanzamiento en la diócesis de Zárate-Campana el día 9 de mayo, con oportunidad del término de la misión en Escobar, la celebración de las Fiestas Patronales diocesanas (por el 8 de mayo, día de la Virgen de Luján) y la consagración de la diócesis al Sagrado Corazón de Jesús, en la iglesia co-catedral de la Natividad del Señor, de Belén de Escobar. Queremos ahora también profundizar sobre la misionariedad en la «catequesis» como aspecto principal, tanto desde la «dimensión misionera de toda la pastoral» como de los «gestos concretos de misión». Así queremos ver la iniciación cristiana, a la luz del Espíritu que nos impulsa a anunciar a Jesucristo, el Amor de los Amores, como Iglesia, que es su Cuerpo. Gracias por toda su dedicación, su apostolado, incluso con sacrificio. Como Pastor de ustedes, invito a todas y a todos los catequistas de la diócesis a este encuentro del día sábado 22, en el Colegio de las Hnas. de Cristo Rey, en la ciudad de Garín, para que sea un momento de alegría y paz en la fe, y de renovado espíritu de fraternidad, en apertura amorosa a lo que el Espíritu Santo nos quiera recordar, de todo lo que Jesús dijo e hizo, para nuestra misión.

XIV
SUPERAR EL ESPÍRITU CLÁNICO

Consultar: http://74.125.113.132/search?q=cache:CmjAJsqJHFoJ:www.camineo.info/news/135/ARTICLE/2774/2009-08-25.html+misi%C3%B3n+diocesana+Sarlinga&cd=30&hl=es&ct=clnk&gl=ar
El prelado hizo especialmente alusión al espíritu eclesial que debe animar a los catequistas y mencionó también que a ese espíritu eclesial se opone cierto avance de lo "clánico", que se ve en parte de la sociedad civil, pero de lo que pueden no estar exentos los católicos, si no dan lugar al espíritu de unidad por el cual Jesús oró. También pidió superar todo "espíritu clánico”, que denota, cuanto más, un "usufructuar más o menos compartido entre pocos", que abate el deseo de la misión, y por consiguiente achica, apoca el apostolado "de llamar a todos al Don del Evangelio " y de "crecer" en todas las formas de la comunión, también en la comunión de bienes. Monseñor Sarlinga relacionó además el Año Paulino Jubilar, el Año Sacerdotal y la disposición de la diócesis a afianzarse y crecer en los ejes de la “comunión” y “misionariedad”, tal como se refiere el Plan Pastoral. El prelado hizo también consideraciones sobre la Iglesia, el amor de Cristo, y la misión de los catequistas y de los agentes pastorales.

XV
LA DIÓCESIS DE ZÁRATE-CAMPANA CELEBRÓ EL IIdo. ENCUENTRO DIOCESANO DE «INFANCIA Y ADOLESCENCIA MISIONERA».

El domingo 13 de septiembre, en el Colegio «María Madre Nuestra» de Manuel Alberti (partido de Pilar)

Consultar:
http://paginasarlinga.blogspot.com/2009/09/la-diocesis-de-zarate-campana-celebro.html

El IIdo. Encuentro diocesano quiso ponerse en la huella del Plan Pastoral diocesano, siguiendo la Misión que Jesús encomendó de ser discípulos y hacer discípulos para Él, en lo cual consiste, precisamente, la raíz de los ejes principales del mencionado Plan, basado sobre la «comunión y la misionariedad». Los niños, adolescentes y animadores misioneros se reunieron el domingo 13, como un signo de animación diocesana, y con la finalidad de celebrar los 160 años de la presencia de esta Obra Pontificia en Nuestro País. Distintas actividades enriquecieron el encuentro, entre las cuales la dinámica pedagógica, que posibilitó la participación de niños y niñas de grupos parroquiales, incluso donde la IAM todavía no está institucionalizada, pero que quisieron conocer o iniciarse en dicho espíritu Misionero. Es de destacar el interés cada vez mayor en el carisma de esta Obra Pontificia de muchas parroquias, comunidades y de Instituciones Religiosas, las que han ido creciendo en van creciendo en conciencia diocesana y sentido de la misión permanente y dimensión misionera de toda la pastoral.

martes, 15 de septiembre de 2009

GRAN PARTICIPACIÓN DE FIELES EN LAS FIESTAS PATRONALES EN EXALTACIÓN DE LA CRUZ

Capilla del Señor, 14 de septiembre de 2009, (Diócesis de Zárate-Campana)

Campana, 14 de septiembre, de la Delegación de comunicación institucional

El partido de Exaltación de la Cruz, con su ciudad cabecera, Capilla del Señor, celebró sus fiestas patronales el día 14, con una novena que la precedió y con su día de fiesta, que incluyó el tradicional repique de la «campana Centenaria», con la adhesión del cuerpo de Bomberos Voluntarios, toque de sirena y salva de bombas, y a continuación el izamiento del pabellón nacional, a cargo de autoridades y vecinos, en la Plaza San Martín, con Suelta de palomas.

A las 10:00 tuvo lugar la celebración de la Santa Misa, que fue presidida por el Sr. Obispo Mons. Oscar Sarlinga y concelebrada por 15 sacerdotes, entre los cuales los dos vicarios generales, el R.P. Tomás Llorente Martínez, msf, y Mons. Edgardo Galuppo, así como el cura párroco, Pbro. Walberto Morales. Como es de tradición centenaria, a continuación de la Santa Misa se encolumnó la procesión alrederor de la plaza, presidida por la preciosa imagen de Cristo Crucificado (del siglo XVIII) y la reliquia de la Vera Cruz, portada por el Obispo. En la procesión participaron las autoridades municipales y gran cantidad de fieles y al final de ella el Obispo bendijo al pueblo presente junto al atrio de la iglesia con la sagrada reliquia.

Ofrecemos a continuación la homilía de S.E. Mons. Oscar Sarlinga

I

LA CRUZ PASCUAL EN EXALTACIÓN DE LA CRUZ

Este año las Fiestas Patronales de esta comunidad parroquial y de ese partido se realizan bajo el lema: "La caridad es amor recibido y ofrecido"1, frase que, en cierto sentido, resume el Misterio de la Cruz en nuestras vidas, puesto que el sufrimiento reproducido en el Cuerpo místico de la Iglesia por la muerte de Cristo, es contribución a la redención de la humanidad, en la caridad, y aseguran la participación en la gloria del Resucitado, el mismo Jesucristo. De ese modo, desde el interior de nuestra vida, el mundo es consagrado a Dios en el Amor2.

Esto nos deja un gran mensaje. ¡Y un gran mensaje de esperanza!. La caridad verdadera, efectiva, transformadora, la caridad como virtud teologal realizada y vivida hace que nuestra relación con el mundo de hoy no sea mundanidad o puro naturalismo, sino expresión del Amor y d ela misión de Cristo. Esta caridad realizada y vivida es raíz de esperanza, tan necesaria, esperanza que siempre resurge, incluso cuando los frutos exteriores de nuestro esfuerzo y de nuestro trabajo se vean escasos, o falten del todo. Nuestra vida cristiana, más que por las obras externas, aunque éstas son importantes, y muy importantes, se hace fecunda sobre todo por el Amor de Cristo, que nos impulsa a la donación total de nosotros mismos, en las condiciones de la vida común de cada día.

¿Podríamos dejar de ver que esta donación por Amor se hace tanto más necesaria en nuestro tiempo?. Porque son tiempos en los que la humanidad se encuentra en un momento crucial de su propia historia. Más que un «mundo nuevo» (porque ya hace siglos que se habla de un «mundo nuevo» que está surgiendo) surgen nuevos aspectos de un «mundo viejo» tanto más necesitado de la perenne «novedad» del cristianismo, que hace nuevas todas las cosas. Es verdad que las personas buscan nuevas formas de pensamientoy de acción, muchos están convencidos de una autosuficiencia sin la fe y sin la gracia divina, a nadie escapa que existe cierto trágico divorcio entre la fe y la vida vivida, e incluso entre pensamiento científico y crecimiento en la fe, en la fe en el Dios viviente. Esto no tiene porqué ser así, forma parte de la relación entre el orden natural y el orden sobrenatural. La Iglesia católica, pensándose a sí misma respecto de su misión ante el mundo y la sociedad, se vio como "sacramento universal de salvación", con plena conciencia de que no se puede dar plenitud humana sin la gracia, sinel Verbo de Dios, que “(…) es el fin de la historia humana, el punto focal de los deseos de la historia y de la civilización, el centro del género humano, la alegría de todo corazón, la plenitud de sus aspiraciones”3.

Por eso la Cruz está llena ya, ella misma, de la Luz Pascual, que quedó como oculta en la Crucifixión y Muerte del Salvador, pero estalló de esplendor en la Resurrección. Por eso, para nosotros, siempre la Cruz es Cruz Pascual, aunque a veces no alcancemos a discernir su Luz, o ésta no se haga tan manifiesta en nuestras vidas. Con ocasión de la reapertura de la Capilla Paulina, en el Vaticano, el Papa Benedicto XVI se refirió a los rostros de San Pedro y San Pablo, pintados al fresco, los cuales están uno frente al otro. Dejó ver su Santidad cómo el rostro de Pedro se dirige al rostro de Pablo, el cual no ve, pero lleva en sí la luz de Cristo resucitado, y de allí colige que “(… ) es como si Pedro, en la hora de la prueba suprema, buscase la luz que le ha dado la verdadera fe a Pablo. He aquí que, en este sentido, los dos íconos llegan a ser como los dos actos de un único drama: el drama del Misterio pasucal: Cruz y Resurrección, muerte y vida, pecado y gracia”4.

Cual recuerdo perenne de sus orígenes religiosos, el espléndido escudo del partido, dividido en cuatro cuarteles, resalta, de entre los símbolos que le dieron nacimiento y razón de ser, a la Cruz hallada por Barragán, originante de la fundación del pueblo, según el relato de tradición oral. En el segundo cuartel del escudo, la refeencia al acontecimiento de la detención dela carreta con la imagen de la «Virgen de Luján» en el año 1630, junto a la Cañada de la Cruz, nos recuerda la presencia de la Virgen Madre en estas tierras, como signo de bendición. No faltan las espigas de trigo entrelazadas, signo de la riqueza de la tierra y también las manifestaciones de la educación, la cultura y el progreso científico.

Exaltación de la Cruz nació, precisamente, con el signo de la Cruz de Cristo, pues ya en épocas de la segunda fundación de la ciudad de Buenos Aires, en 1580, estas tierras eran conocidas como el "Pago de la Cañada de la Cruz", en razón del arroyo que conservó su denominación a través de los siglos. Como es por todos conocido, en en año 1750, Francisco Casco dona una capilla, dada en llamar "del Señor de la Exaltación de la Cruz", y fue el entonces Obispo de Buenos Aires, Fray Juan de Arregui, quien, habiendo realizado su visita pastoral a la Capilla y su zona de influencia, la erigió en Viceparroquia, determinando que el Teniente Cura de San Antonio de Areco, el Pbro. Miguel González de Leyva, actuara en calidad de vicepárroco. Esos son los orígenes y, como tantas otras ciudades, el pueblo se formó alrededor de la iglesia, con sentido de fe y civilización.

La Cruz pascual brilló también en Exaltación de la Cruz, cuya ciudad cabecera se llama, por sus orígenes, Capilla del Señor.

II

LA FIESTA DE LA «EXALTACIÓN DE LA CRUZ»

Esta fiesta recuerda dos acontecimientos principales con relación a la Santa Cruz de Cristo, siendo el primero su descubrimiento, realizado por Santa Elena, la madre del emperador Constantino el Grande, ocurrido el 14 de septiembre del año 320, y de aquí la fecha que se ha conservado para la Fiesta religiosa. De hecho, la Basílica del Santo Sepulcro fue mandada construir por la madre del emperador, tras el descubrimiento, y la Fiesta en honor de la Cruz fue celebrada por primera vez en el año 335. El segundo acontecimiento dice referencia a la recuperación de la Cruz de manos de los persas, los cuales habían invadido y arrasado la Tierra Santa, llevándose, por orden del Rey Cosroes Parviz, también la Cruz como botín de guerra después de haberse apoderado de Jerusalén y haber hecho muchos miles de mártires cristianos. Con las vicisitudes de la historia, catorce años después, el Rey Heraclio de Constantinopla, que había trabado guerra con los persas, venció a Cosroes, tomó de nuevo la Verdadera Cruz, y entró en Jerusalén portándola, habiéndola repuesta sobre el monte Calvario. Este hecho ocurrió el 3 de mayo del año 629, año a partir del cual el pueblo cristiano celebra con toda solemnidad la fiesta de la «Exaltación de la Cruz», aunque con la fecha de su descubrimiento.

Todos estos acontecimientos en torno de la Fiesta de la Exaltación de la Cruz nos muestran una vez más el sentido profundo de este Misterio: cómo la glorificación de Jesucristo pasa a través de su sufrimiento y entrega, sometiéndose voluntariamente a la condición de esclavo (y de hecho la crucifixión era el suplicio destinado a los esclavos). La Cruz se transformó en el símbolo y compendio de la religión cristiana porque la evangelización primera, la de los Apóstoles, es la presentación de Cristo crucificado, muerto y resucitado.

III

LA CRUZ PASCUAL, PRESENCIA Y ACCIÓN TRANSFORMADORA DESDE DENTRO

Creo que esta Festividad, la de la Cruz Pascual, ha de animarnos nuevamente a creer en la Iglesia como una realidad viviente, visible y espiritual al mismo tiempo5, realidad que vive y se desarrolla en la historia6, compuesta por muchos, muchísimos miembros y órganos diversos, pero que están íntimamente unidos entre sí7 por la Gracia, y son partícipes de la misma fe, de la misma misión, y por consiguiente de la misma responsabilidad, cada uno con sus dones y carismas dados, para la edificación y crecimiento de la comunidad, por el único Espíritu vivificador8. Esta creencia nos une, y nos da fuerzas e impulso, porque sólo en la concordia y en la unidad se puede crecer.

El olvidar que, sin ser del mundo, estamos en el mundo, sería olvidar el sentido de la responsabilidad cristiana respecto de nuestra sociedad de hoy, y del llamado a “(…)iluminar y ordenar todas las realidades temporales (…) a fin de que siempre se realicen y prosperen según Cristo, y sean para alabanza del Creador y Redentor"9. Es ese llamado el que nos hace profundizar en la conciencia del hecho que la Iglesia “(…)camina junto con toda la humanidad, y experimenta junto con el mundo la misma suerte terrena, y es como el fermento, y casi el alma, de la sociedad humana”10. ¿Reasumiremos esa misión, en esta privilegiada oportunidad de esta Fiesta de la Exaltación de la Cruz?. Porque el Señor nos habla, se dirige al interior de nuestros corazones, nos impulsa a asumir su Amor y llevarlo a los demás. A todo don, le corresponde una responsabilidad. Y ésta se realiza en la vía de un camino, personal y comunitario, de fe, entroncado en el Gran Camino que es Jesucristo mismo, el cual “(…) no ha venido a enseñarnos una filosofía, sino a mostrarnos el camino que conduce a la vida”11, como nos lo ha dicho en el día de ayer el Papa Benedicto XVI.

Tenemos una ayuda poderosísima, es la invocación a la Virgen María, para que, como le rogó en el día de ayer el Papa Benedicto, Ella «pida para nosotros el don del coraje, para que en cada situación testimoniemos que la cruz de Cristo no es para nosotros motivo de escándalo» (…) por ser «signo del infinito amor de Dios, en el cual se cumplió nuestra salvación»12. Que Ella nos guíe como «Estrella de la evangelización», Ella, que estuvo, sufriente como ningún otro ser humano, junto a la Cruz de su Hijo, lo vio triunfante en su Resurrección gloriosa, y goza del esplendor de su Hijo, que está junto al Padre y al Espíritu, y vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos, nos dé coraje para vivir cada día más su Reino, el que no tendrá fin.




1 BENEDICTO XVI, Enc. Enc. Caritas in veritate, n. 5.

2 Cf CONC. ECUM. VAT. II, Const. dogm.Lumen gentium, 34.

3 CONC. ECUM. VAT. II, Const. past. Gaudium et spes, 45.

4 BENEDICTO XVI, Alocución en la celebración de las Vísperas, con ocasión de la reapertura de la Capilla Paulina, Ciudad del Vaticano, 6 de julio de 2009, en: L’Osservatore Romano – Ed. en lengua italiana, 6-7 luglio 2009.

5 Cf CONC. ECUM. VAT. II, Const. dogm.Lumen gentium, 8.

6 Cf . Ib., 3, 5, 6, 8.

7 Cf. Ib.ib., 7.

8 Cf. Ib., 7, 12.

9 Ib. 31.

10 CONC. ECUM. VAT. II, Const. past. Gaudium et spes, 40.

11 Benedicto XVI, Alocución del Ángelus, en la vigilia de la fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz, Castelgandolfo, 13 de septiembre de 2009.

12 Ibid. En este sentido, el Papa ha explicado que Jesús tuvo que hacerles entender a sus discípulos que “(…) no basta creer que Él es Dios, sino que movidos por la caridad, es necesario seguirle en su camino, el de la cruz”. “Jesús no ha venido a enseñarnos una filosofía –ha enfatizado Benedicto XVI- sino a mostrarnos un camino, el camino que nos conduce a la vida. Este camino es el amor, que es la expresión de la verdadera fe. Si uno ama al prójimo con corazón puro y generoso, quiere decir que conoce verdaderamente a Dios. Si en cambio uno dice que tiene fe, pero no ama a sus hermanos, no es un verdadero creyente” (Ibid).